Universo noviembre-diciembre 2022

41 NOVIEMBRE-DICIEMBRE 2022 ASTRO PUBLISHING UNIVERSO cómo se forman» , explica la directora del estudio, Elena Sabbi, del Space Tele- scope Science Institute de Baltimore. «Tenemos varios modelos que hacen predicciones, y algunas de estas predic- ciones son contradictorias. Queremos determinar qué es lo que regula el pro- ceso de formación estelar, porque estas son las leyes que necesitamos para en- tender también lo que vemos en el Uni- verso primitivo.» Los investigadores de- terminaron el movimiento de las estre- llas en NGC 346 de dos maneras dife- rentes. Utilizando el Hubble, Sabbi y su equipo midieron los cambios en la posi- ción de las estrellas a lo largo de 11 años. Las estrellas de esta región se mue- ven a una velocidad media de 3200 ki- lómetros por hora, lo que significa que en 11 años se mueven 320 millones de kilómetros. Esto es aproximadamente el doble de la distancia entre la Tierra y el Sol. Pero este cúmulo está relativa- mente lejos, dentro de una galaxia ve- cina. Esto significa que el movimiento observado es muy pequeño y, por tanto, difícil de medir. Estas observaciones ex- traordinariamente precisas sólo fueron posibles gracias a la exquisita resolución del Hubble y a su alta sensibilidad. Ade- más, el historial de observaciones de tres décadas del Hubble proporciona una línea de base para que los astrónomos puedan seguir los diminutos movimien- tos celestes a lo largo del tiempo. El se- gundo equipo, dirigido por Peter Zeidler de AURA/STScI para la Agencia Espacial Europea, utilizó el instrumento Multi Unit Spectroscopic Explorer (MUSE) del VLT para medir la velocidad radial, que determina si un objeto se acerca o se aleja de un observador. «Lo que fue re- almente sorprendente es que utilizamos dos métodos completamente diferentes con instalaciones distintas y básicamente llegamos a la misma conclusión de for- ma independiente» , dijo Zeidler. «Con el Hubble, se pueden ver las estrellas, pero con MUSE también podemos ver el mo- vimiento del gas en la tercera dimen- sión, y confirma la teoría de que todo está en espiral hacia dentro.» L os astrónomos se han quedado per- plejos al encontrar estrellas jóvenes girando en espiral hacia el centro de un enorme cúmulo de estrellas en la Pequeña Nube de Magallanes, una ga- laxia satélite de la Vía Láctea. El brazo exterior de la espiral de esta enorme guardería estelar de forma extraña −lla- mada NGC 346− puede estar alimen- tando la formación de estrellas en un movimiento fluvial de gas y estrellas. Se trata de una forma eficaz de alimentar el nacimiento de estrellas, afirman los in- vestigadores. La Pequeña Nube de Ma- gallanes tiene una composición química más simple que la de la Vía Láctea, lo que la hace similar a las galaxias que se encuentran en el Universo más joven, cuando los elementos más pesados eran más escasos. Por ello, las estrellas de la Pequeña Nube deMagallanes ardenmás calientes y, por tanto, agotan su combus- tible más rápidamente que en nuestra Vía Láctea. La Pequeña Nube de Maga- llanes, a 200000 años luz de distancia, es también uno de nuestros vecinos galác- ticos más cercanos. Aprender cómo se forman las estrellas en la Pequeña Nube de Magallanes ofrece un nuevo giro sobre cómo pudo producirse la tormenta del nacimiento de estrellas al principio de la historia del Universo, cuando es- taba experimentando un "baby boom" unos dos o tres mil millones de años des- pués del Big Bang (el Universo tiene ahora 13800 millones de años). Los nue- vos resultados demuestran que el pro- ceso de formación estelar allí es similar al de nuestra propia Vía Láctea. Con sólo 150 años luz de diámetro, NGC 346 tiene la masa de 50000 soles. Su intrigante forma y su rápido ritmo de formación es- telar han desconcertado a los astróno- mos. Ha sido necesaria la potencia com- binada del telescopio espacial Hubble de la NASA/ESA y del Very Large Telescope (VLT) del Observatorio Europeo Austral para desentrañar el comportamiento de estemisterioso nido estelar. «Las estrellas son las máquinas que esculpen el Uni- verso. No tendríamos vida sin las estrellas y, sin embargo, no entendemos del todo ! L a espiral roja superpuesta en NGC 346 tra- za el movimien- to de las estre- llas y el gas hacia el centro. Los científicos dicen que este movimiento en espiral es la forma más efi- ciente de ali- mentar la for- mación de es- trellas desde el exterior hacia el centro del cúmulo. [NASA, ESA, A. James (STScI)]

RkJQdWJsaXNoZXIy MjYyMDU=