Universo noviembre-diciembre 2020

26 NOVIEMBRE-DICIEMBRE 2020 CONTAMINACIÓN ATMOSFÉRICA algunos escenarios, ciertas moléculas espe- cíficas no pueden ser producidas por pro- cesos naturales, o no pueden persistir en at- mósferas planetarias sin el apoyo de activi- dades biológicas. No existen argumentos só- lidos para afirmar que la presencia de vida en otros planetas pueda tener un impacto en las atmósferas totalmente diferente al único caso que conocemos. Por tanto, si otra civilización ha evolucionado contaminando su propia atmósfera, nuestros métodos de investigación deberían poder descubrirla (dentro de ciertos límites, por supuesto). Obviamente, esta oportunidad no es unidi- reccional. La contaminación de la atmósfera terrestre también es detectable desde otros sistemas planetarios, y sería interesante sa- ber cuán lejos ha llegado, porque ese es el límite más allá del cual un observador extra- terrestre solo puede detectar la presencia genérica de vida en nuestro planeta, pero no la presencia de una civilización evolucio- nada. Esto equivale a decir que más allá de ese límite no tiene mucho sentido buscar posibles mensajes que nos envíen intencio- nadamente. Comprender hasta dónde ha llegado la luz reflejada de nuestra atmós- fera contaminada puede, en última instan- cia, mejorar la orientación de algunos pro- gramas SETI. Para determinar esa distancia, debemos ha- cer un viaje al Antropoceno. Este término (introducido en la década de 1980 por el biólogo estadounidense Eugene Filmore Stoermer) indica el período dentro del cual el impacto de la actividad humana sobre el medio ambiente produjo efectos que son in- equívocamente distinguibles de los produci- E n este gráfico de emisiones globales de dió- xido de carbono desde la época de la primera Revo- lución Industrial, se puede ver que ese período ini- cial e intenso de contaminación at- mosférica es in- significante en comparación con las emisiones del siglo pasado. [CDIAC] UNIVERSO