Universo enero-febrero 2024

39 ENERO-FEBRERO 2024 ASTRO PUBLISHING escalas de unos cientos de años luz. Sin embargo, el fenómeno de acre- ción de gas en regiones mucho más reducidas, a algunas docenas de años luz del centro de una galaxia, era des- conocido hasta ahora debido a la es- cala espacial tan pequeña que abarca. Para poder entender el crecimiento de los agujeros negros en términos cuantitativos, cabe medir la tasa de acreción y determinar la cantidad y los tipos de gas (plasma, gas atómico y gas molecular) que se expulsan en esos chorros a escalas tan pequeñas. Desafortunadamente, los estudios observacionales no han avanzado mucho en esa área hasta ahora. Un equipo internacional de investi- gación encabezado por Takuma Izumi, profesor asistente del Obser- vatorio Astronómico Nacional de Japón (quien se encontraba afiliado al observatorio y a la Universidad Me- tropolitana de Tokio cuando se llevó a cabo el estudio), alcanzó un hito sin precedentes a nivel mundial al medir cuantitativamente los flujos de gas y sus estructuras en todas las fases (de plasma, atómica y molecular) a una escala diminuta — de unos pocos años luz — alrededor de un agujero negro supermasivo usando el Ata- cama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA). Las observaciones de gases multifase pueden ayudar a en- tender a cabalidad la distribución y la dinámica de la materia que rodea un agujero negro. En este estudio se observó la galaxia Circinus, que cons- tituye un núcleo galáctico activo tí- pico del Universo cercano, a una re- solución de aproximadamente un año luz, la más alta lograda a la fecha en observaciones de gas multi- fase en un núcleo galáctico activo. El equipo de investigación logró ob- servar por primera vez el flujo de acreción hacia el agujero negro su- permasivo dentro del disco de gas de alta densidad que se extiende a lo largo de varios años luz desde el cen- tro de la galaxia. Identificar este flujo de acreción siempre había sido una tarea difícil debido a la escala dimi- nuta de la región observada y los complejos movimientos del gas cerca del centro galáctico. Sin embargo, esta vez el equipo de investigación determinó con precisión dónde el gas molecular observado en primer pla- no absorbía la luz del brillante núcleo galáctico activo situado detrás. Esto fue posible gracias a las observacio- nes en alta resolución logradas con ALMA, que revelaron, tras un análisis detallado, que este material absor- bente se aleja de nosotros. Y como dicho material se encuentra siempre entre el núcleo galáctico activo y nos- UNIVERSO I lustración que representa la distri- bución de medio interestelar en el núcleo galáctico activo de acuerdo con los resultados de esta observa- ción. El gas molecular de alta densi- dad fluye de la galaxia hacia el agujero negro siguiendo el plano del disco. El material acumulado alrede- dor del agujero negro genera una gran cantidad de energía que des- truye el gas molecular y lo devuelve a los estados atómico y de plasma. La mayor parte de estos gases multi- fase es expulsada en chorros pro- yectados por el núcleo (incluidos chorros de plasma hacia arriba del disco y chorros moleculares o atómi- cos principalmente diagonales). La mayoría de estos chorros regresarán al disco, en forma similar a los cho- rros de una fuente de agua. [ALMA (ESO/NAOJ/NRAO), T. Izumi et al.]

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