Universo enero-febrero 2019

50 ENERO-FEBRERO 2019 CRÓNICAS ESPACIALES D istribución en todo el cielo de una 'serie extraña’ de estrellas detec- tadas en la segunda publicación de datos de la misión Gaia de la ESA. Estas estrellas se mueven a lo largo de trayectorias alargadas en dirección opuesta a la mayoría de los otros cien mil millones de estrellas de nuestra Vía Láctea y tienen una composición química marcadamente diferente, lo que indica que pertenecen a una po- blación estelar claramente distinta. [ESA/Gaia/DPAC; A. Helmi et al 2018] S imulación por ordenador de la fusión entre una galaxia como la joven Vía Lác- tea, cuyas estrellas se muestran en cian, y una galaxia más pequeña, indicada en rojo. [Koppelman, Villalobos & Helmi, Kapteyn Astronomical Institute, Univer- sity of Groningen, The Netherlands] De forma similar, las estrellas de Gaia- Encelado fueron profundamente en- terradas en los datos de Gaia, y han sacudido a la Vía Láctea conduciendo a la formación de su disco grueso» , explica Amina. Aunque no eran nece- sarias realmente mas evidencias, el equipo también encontró cientos de estrellas variables y trece cúmulos glo- bulares en la Vía Láctea. que siguen trayectorias similares a las de las estre- llas de Gaia-Encelado, indicando que originalmente eran parte de ese sis- tema. Los cúmulos globulares son gru- pos de hasta millones de estrellas, ! nes de años, sin embargo, cuando tuvo lugar la fusión con Gaia-Ence- lado la propia Vía Láctea era mucho menor, por lo que la relación entre los dos eran más como cuatro a uno. Por lo tanto, fue claramente un impor- tante golpe a nuestra galaxia. «Ver que ahora estamos empezando a des- entrañar la historia de la formación de la Vía Láctea es muy emocio- nante» , dice Anthony Brown, de la Universidad de Leiden, Países Bajos, coautor del artículo y también ge- rente del Consorcio Ejecutivo de aná- lisis y procesamiento de datos Gaia. Desde las primeras discusiones en la construcción de Gaia hace 25 años, uno de los objetivos clave de la misión era examinar las diversas corrientes estelares de la Vía Láctea, y recons- truir su historia temprana. Esa visión esta cumplida. «Gaia fue construído para responder a tales preguntas» , dice Amina. «Podemos decir ahora que esta es la forma en que se formó la galaxia en esas primeras épocas. Es fantástico. Es tan hermoso y te hace sentir tan grande y tan pequeño al mismo tiempo.» «Al leer los movi- mientos de las estrellas dispersas por el cielo, ahora somos capaces de rebo- binar la historia de la Vía Láctea y des- cubrir uno de los principales hitos en su formación, y esto es posible gracias a Gaia» , concluye Timo Prusti, cientí- fico del proyecto Gaia en la ESA. juntas por su gravedad mutua y orbi- tando el centro de una galaxia. El hecho de que tantos grupos pue- dan ser unidos a Gaia-Encelado es otra indicación de que esto debe haber sido una gran galaxia por dere- cho propio, con su propio séquito glo- bular. Un análisis posterior reveló que esta galaxia era del tamaño de una de las nubes de Magallanes, dos galaxias satélites aproximadamente diez veces más pequeñas que el tamaño actual de la Vía Láctea. Hace diez mil millo- UNIVERSO